jueves, 12 de enero de 2017

#12 El lago de los cisnes



Лебединое Озеро (Lebedínoye óziero), op. 20
Alicia Alonso como el Cisne negro (1955)
Fuente: Library of Congress - (neg. no. LC-USZ62-115331)
via Wikimedia Commons




Compositor: Piotr Ilich Chaikovski
Fecha del estreno: 4 de marzo de 1877


Un cuento de hadas, el ballet por excelencia

A pesar de que no fue muy bien recibido en su estreno en el Teatro Bolshói de Moscú, El lago de los cisnes se ha convertido con el tiempo en un clásico hasta el punto que –puede decirse- es el ballet por antonomasia, del que todo el mundo se acuerda cuando se menciona esta forma musical.

Es tonto decirlo, lo sé, pero la música para ballet fue creada específicamente para ser bailada. Está al servicio de la danza. Por ello, a mi juicio, la mejor manera de disfrutarla es viendo una representación. Si nos quedamos sólo con la música, es como si faltara algo. Como ocurre con las bandas sonoras, a veces funcionan fabulosamente bien en las salas de concierto y otras veces se nota que falta algo. Esto último es lo que a mí me pasa con El lago de los cisnes: tienes que verlo representado, no puedes quedarte sólo en la música grabada de un disco.

La historia que se narra es la de un cuento de hadas, con su reina cisne Odette (el cisne blanco), el príncipe Sigfrido que tiene que casarse pero preferiría hacerlo por amor, un brujo perverso –Rothbart- y su hija Odile (el cisne negro). Amores contrariados, engaños, traición y luego un final que depende de la representación puede ser de una u otra manera, a gusto del consumidor, o del director de escena.

Leo en La discoteca ideal de música clásica, de Kenneth McLeish y Valerie McLeish, que:


El lago de los cisnes encarna el mundo romántico característico del siglo XIX, con sus noches de luna, sus grutas, sus bosques brumosos y los oscuros deseos del corazón.


Junto con otros dos ballets de Chaikovski, El cascanueces y La bella durmiente, todos de Chaikovski, forma un trío inigualable por su calidad musical y de lo mejor del repertorio.

Para saber más, la wikipedia. En You Tube hay unas cuantas representaciones. Se puede buscar fácil por el título en inglés, Swan Lake. El enlace que dejo es a una representación del ballet Kirov.




A la hora de elegir una grabación para nuestra discoteca, tenemos que optar entre una que sea integral, de todo el ballet u otra que escoja los mejores momentos. De las integrales, creo que la más apreciada es la de Seiji Ozawa con la Orquesta Sinfónica de Boston (DG). De las grabaciones incompletas, en la guía Penguin de música clásica le ponen un rosetón a la del Concertgebouw de Ámsterdam dirigido por Anatole Fistoulari (Decca), grabada en el año 1961.

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